Implementar Resi-EQIFar en la atención sociosanitaria de la Comunidad Valenciana no va de ideologías políticas, ni de si la medicación la dispensa un ámbito asistencial farmacéutico u otro, ni de si se crean o no puestos de trabajo, ni de cosas similares. Resi-EQIFar va de aportar valor, tanto a los pacientes como a la sociedad.

Berwick1, en el “Triple Aim”, indica los objetivos que un sistema sanitario debe satisfacer, siendo estos, mejorar la salud de la población, reducir el coste per cápita y mejorar la experiencia de la asistencia. A partir de este planteamiento, el profesor Jaume Ribera del IESE, al que he tenido la suerte de escuchar en dos ocasiones, habla del valor que una organización sanitaria es capaz de aportar, asimilándolo al nivel de excelencia operativa que es capaz de alcanzar, entendiendo esta excelencia operativa como la conjunción de la excelencia técnica, de procesos y de servicio, que es capaz de proveer.

Creo firmemente en los planteamientos de Berwick y de Ribera, y en su aplicación a la farmacia hospitalaria, con una perspectiva macro en el primer caso, y meso o micro en el segundo. Tres perspectivas, todas ellos importantes, y todas ellas necesarias, en las que Resi-EQIFar cumple con solvencia.

Desde la perspectiva asistencial, Resi-EQIFar aporta calidad, seguridad y equidad, al trasladar el modelo hospitalario de atención farmacéutica especializada, al conjunto del ámbito sociosanitario.

El paciente estará en la que de facto es su casa, pero sin que lo perciba, tendrá el mismo nivel de calidad y seguridad en su farmacoterapia que el que recibiría en un hospital.

La experiencia, los conocimientos y los modelos de desempeño desarrollados a lo largo de los años por la farmacia hospitalaria, se aplicarán al ámbito sociosanitario. La validación farmacéutica de la prescripción médica, la participación en el equipo multidisciplinar de atención al paciente, tanto el del ámbito sociosanitario como el del resto del Departamento de Salud, ejerciendo de puente entre ambos, y el acceso a la historia clínica (asumiendo y aceptando la responsabilidad inherente a dicho acceso), son solo algunas de las características de un modelo de atención farmacéutica que es referencia en el ámbito hospitalario hace ya muchos años.

Desde la perspectiva de servicio, Resi-EQIFar aporta comodidad y seguridad, a un nivel sin precedentes, tanto al propio paciente como al personal sanitario que le atiende

Para ello, proveerá un embalaje individual por paciente con sus medicamentos para una semana, reenvasando cada dosis de forma individualizada dentro de su propio blíster (lo que mantiene la caducidad y garantía original del fabricante), ordenadas por día y hora de administración, en un sistema de anilla o similar que impide la pérdida de dosis, y permite visualizar si se ha administrado o no.

Cada una de estas dosis dispone de un código bidimensional único que permite, por primera vez en el ámbito sociosanitario, con una adaptación de los sistemas de información, verificar en el momento de la administración si es el paciente correcto, el medicamento correcto, la dosis correcta, la hora correcta y la vía de administración correcta.

Desde la perspectiva económica, Resi-EQIFar aporta más y cuesta menos

La adquisición a PVL menos los descuentos obtenidos por compra centralizada para más de 27.000 plazas, junto con la gestión de devoluciones, genera una expectativa de ahorro superior al 50% en el coste de medicamentos sobre el modelo de centros privados actual, lo que permite asumir todos los costes que el modelo genera, y generar ahorro.

Pero ojo, que no se trata de si ahorra 13, 10 o 1 millón de euros anuales. Incluso aunque costara dinero, que no lo hace, merecería la pena. Y es que el beneficio derivado de las perspectivas anteriores, a través de la disminución de errores de medicación, iatrogenia, interacciones, etc., junto con la verificación en el momento de la administración, posibilitan una mejora en los resultados en salud y una disminución de costes secundarios por ingresos y fracasos terapéuticos evitados, difíciles de cuantificar en este momento, pero sin duda existentes y elevados.

Resi-EQIFar es un proyecto que modifica el status quo, transformando el modelo actual. Es un cambio, y como tal, genera resistencias, pero de lo que no hay duda es que aporta valor al paciente y a sus cuidadores. Maximizar el valor que puede aportar cada ámbito asistencial farmacéutico, de forma colaborativa a ser posible, y sin descalificaciones, es el objetivo que nos debe mover, con el fin de mejorar la salud de las personas.

Por todo ello sigo creyendo en Resi-EQIFar, y sigo colaborando en él, para su implantación efectiva en 2018.

Javier

1Donald M. Berwick, Thomas W. Nolan and John Whittington The Triple Aim: Care, Health, And Cost Health Affairs 27, no.3 (2008):759-769

Implementar Resi-EQIFar en la atención sociosanitaria de la Comunidad Valenciana no va de ideologías políticas, ni de si la medicación la dispensa un ámbito asistencial farmacéutico u otro, ni de si se crean o no puestos de trabajo, ni de cosas similares. Resi-EQIFar va de aportar valor, tanto a los pacientes como a la sociedad.

Berwick1, en el “Triple Aim”, indica los objetivos que un sistema sanitario debe satisfacer, siendo estos, mejorar la salud de la población, reducir el coste per cápita y mejorar la experiencia de la asistencia. A partir de este planteamiento, el profesor Jaume Ribera del IESE, al que he tenido la suerte de escuchar en dos ocasiones, habla del valor que una organización sanitaria es capaz de aportar, asimilándolo al nivel de excelencia operativa que es capaz de alcanzar, entendiendo esta excelencia operativa como la conjunción de la excelencia técnica, de procesos y de servicio, que es capaz de proveer.

Creo firmemente en los planteamientos de Berwick y de Ribera, y en su aplicación a la farmacia hospitalaria, con una perspectiva macro en el primer caso, y meso o micro en el segundo. Tres perspectivas, todas ellos importantes, y todas ellas necesarias, en las que Resi-EQIFar cumple con solvencia.

Desde la perspectiva asistencial, Resi-EQIFar aporta calidad, seguridad y equidad, al trasladar el modelo hospitalario de atención farmacéutica especializada, al conjunto del ámbito sociosanitario.

El paciente estará en la que de facto es su casa, pero sin que lo perciba, tendrá el mismo nivel de calidad y seguridad en su farmacoterapia que el que recibiría en un hospital.

La experiencia, los conocimientos y los modelos de desempeño desarrollados a lo largo de los años por la farmacia hospitalaria, se aplicarán al ámbito sociosanitario. La validación farmacéutica de la prescripción médica, la participación en el equipo multidisciplinar de atención al paciente, tanto el del ámbito sociosanitario como el del resto del Departamento de Salud, ejerciendo de puente entre ambos, y el acceso a la historia clínica (asumiendo y aceptando la responsabilidad inherente a dicho acceso), son solo algunas de las características de un modelo de atención farmacéutica que es referencia en el ámbito hospitalario hace ya muchos años.

Desde la perspectiva de servicio, Resi-EQIFar aporta comodidad y seguridad, a un nivel sin precedentes, tanto al propio paciente como al personal sanitario que le atiende

Para ello, proveerá un embalaje individual por paciente con sus medicamentos para una semana, reenvasando cada dosis de forma individualizada dentro de su propio blíster (lo que mantiene la caducidad y garantía original del fabricante), ordenadas por día y hora de administración, en un sistema de anilla o similar que impide la pérdida de dosis, y permite visualizar si se ha administrado o no.

Cada una de estas dosis dispone de un código bidimensional único que permite, por primera vez en el ámbito sociosanitario, con una adaptación de los sistemas de información, verificar en el momento de la administración si es el paciente correcto, el medicamento correcto, la dosis correcta, la hora correcta y la vía de administración correcta.

Desde la perspectiva económica, Resi-EQIFar aporta más y cuesta menos

La adquisición a PVL menos los descuentos obtenidos por compra centralizada para más de 27.000 plazas, junto con la gestión de devoluciones, genera una expectativa de ahorro superior al 50% en el coste de medicamentos sobre el modelo de centros privados actual, lo que permite asumir todos los costes que el modelo genera, y generar ahorro.

Pero ojo, que no se trata de si ahorra 13, 10 o 1 millón de euros anuales. Incluso aunque costara dinero, que no lo hace, merecería la pena. Y es que el beneficio derivado de las perspectivas anteriores, a través de la disminución de errores de medicación, iatrogenia, interacciones, etc., junto con la verificación en el momento de la administración, posibilitan una mejora en los resultados en salud y una disminución de costes secundarios por ingresos y fracasos terapéuticos evitados, difíciles de cuantificar en este momento, pero sin duda existentes y elevados.

Resi-EQIFar es un proyecto que modifica el status quo, transformando el modelo actual. Es un cambio, y como tal, genera resistencias, pero de lo que no hay duda es que aporta valor al paciente y a sus cuidadores. Maximizar el valor que puede aportar cada ámbito asistencial farmacéutico, de forma colaborativa a ser posible, y sin descalificaciones, es el objetivo que nos debe mover, con el fin de mejorar la salud de las personas.

Por todo ello sigo creyendo en Resi-EQIFar, y sigo colaborando en él, para su implantación efectiva en 2018.

Javier

1Donald M. Berwick, Thomas W. Nolan and John Whittington The Triple Aim: Care, Health, And Cost Health Affairs 27, no.3 (2008):759-769